Talan tres grandes chopos en San Juan e inician la poda en La Laguna

El riesgo de caída de algunos árboles de la Laguna de San Juan del Monte se ha eliminado. La Junta ha culminado el proceso de tala de tres grandes chopos que amenazaban con la rotura de alguna de sus ramas y su impacto con las casetas sanjuaneras que tiene debajo. «Por fin los han quitado», decían en la cuadrilla Los Barbis, que ayer aprovechaban para hacer algunas reparaciones en la zona donde se ha hecho la tala.


La intervención ha afectado de forma especial a un gran chopo de más de unos 40 metros de altura y que tenía varias ramas de gran envergadura. Éste ha sido talado desde la base, ya que además de la peligrosidad de las ramas, el crecimiento incontrolado había provocado una gran inclinación, precisamente hacia la zona donde están ubicadas las casetas. Por ello, y teniendo en cuenta que es una especie no autóctona y sin valor para la zona natural que es el paraje sanjuanero, se aceptó por parte de Medio Ambiente la tala total.


Menos agresiva a ha sido la actuación en otros dos árboles, también chopos, que hay en ese mismo entorno que comprende la zona de la fuente. Por u lado, junto a los surtidores, se han cortado casi todas las ramas de otro de los grandes chopos existentes, de tal forma que se elimina el riesgo de rotura en caso de fuerte viento o, como ha ocurrido este invierno en muchos puntos de San Juan, por el peso de la nieve sobre las ramas.


Además, en la parte delantera de las casetas, en concreto entre la de Los Barbis y la de Los Revoltosos, se han cortado igualmente las ramas de otro árbol, dejando ese espacio de entrada a La Laguna mucho más despejado.


Donde no se ha actuado para la tala en profundidad ha sido en otras especies que también hay sobre las casetas, como algunos castaños, ya que en este caso los criterios ambientales obligan a mantenerlos por ser especies autóctonas.


En Los Barbis estaban contentos por la eliminación de esos riesgos. «Mira que se cae una rama de esas enormes cuando hay aquí gente...», decían señalando los enormes tocones que han quedado pendientes de recoger. Unos trozos de los árboles talados que al verlos troceados en el suelo dan idea de las dimensiones reales de los chopos, con trozos de más de un metro de anchura.


Lo que se hará de forma inminente es la segunda fase de la intervención planteada para este año en el paraje en cuanto a tratamientos medioambientales. Se trata de la poda integral de todos los árboles que hay en La Laguna, de tal forma que se eliminen la muchas ramas de pequeño grosor que han ido surgiendo en años sin mantenimiento.
Se quiere dar al paraje un aspecto más bonito y menos frondoso, teniendo en cuenta que durante las fiestas es uno de los principales puntos de reunión de los sanjuaneros. Además se conseguirá eliminar igualmente el riesgo de que haya algunas roturas de ramas que puedan provocar daños en las casetas o a las personas.

Arreglos

En paralelo a toda esta intervención se actúa en el proceso de reparación de los tejados de las casetas. Los plazos se van cumpliendo y se espera que para antes de que lleguen las fiestas el cien por cien de las casetas a reparar estén terminadas. Los resultados ya son visibles en muchas de ellas, algunas con la sustitución íntegra de las cubiertas, mientras que otras ha optado por hacer parches aprovechando el material desechado por otras cuadrillas, que una vez sellado sobre la tejavana, apenas muestra diferencias.


También está pendiente la ejecución en los próximos días de otras obras complementarias que se comprometió a hacer la Junta para la mejora del paraje. Se trata de la colocación de varias toneladas de tierra en la zona de explanada exterior de La Laguna para evitar que el agua se acumule cuando llueve y se formen charcos. La misma solución se quiere dar en el aparcamiento que hay en la carretera de subida, enfrente del acceso a La Calera, donde se acumula el agua cada vez que llueve de forma intensa. También en la zona de La laguna se han colocado unas nuevas estacas de madera que hacen de tope para delimitar la zona en la que está prohibida la entrada de vehículos.

FUENTE: diariodeburgos.es